domingo, 4 de septiembre de 2011

Consejos para el escritor novel

Lo primero que debe preguntarse aquél que después de una mala noche, después de leer una novela magnífica o después de darse cuenta de que tiene tantas cosas que contar que si no las cuenta, se muere. Insisto, lo primero que debe preguntarse es si no lo pasaría mejor haciendo cualquier otra cosa. Y cuando digo cualquier cosa, no hablo metafóricamente: volar aviones de corcho, hacer labores de ganchillo o ir al gimnasio a ponerse cachas. Si después de pensarlo bien, dormir una noche del tirón y no abrir un libro durante, al menos, una semana, sigues pensando lo mismo, entonces, no tienes remedio.

Hay diferentes tipos de escritores y lo primero que debes hacer es saber en qué grupo estás. Verás, está el que quiere ser escritor porque se imagina yendo a cócketeles en los que la gente hablará de cosas muy cultas e interesantes. El que se imagina dando entrevistas en la tele porque van a hacer la peli de su libro, que ha sido un bombazo. Está el típico que te dice "yo soy escritor" como si te dijese ¿y tú qué excusa tienes para merecer estar vivo? Y el que trata por todos los medios de "colocarse" dentro de una de las numerosas "mafias" de escritores (son fáciles de localizar, les gusta hacerse fotos juntos, van a presentaciones mutuas y se entrevistan entre ellos en revistas literarias).

Pero el peor, te lo aseguro, es el escritor solitario, ese que detesta relacionarse con otros escritores porque los considera esnobs y aburridos, que no soporta los Talleres literarios, que odia hacer presentaciones y hablar de sí mismo y que no tiene agente. Huye de ese modelo como de la peste.

Una vez hayas localizado el grupo al que perteneces tu camino estará más o menos escrito y debes seguir las pautas que marquen los Grandes en cada campo, esos que están de vuelta de todo y que te mirarán con cara de "animalico, se cree que es escritor".

Si quieres ser de los primeros, apúntate a todos los saraos, hazte con un lugar en los sitios de internet que frecuentan escritores (hay muchos, busca en google). Haz amigos escritores, pero amigos de verdad, no vale eso de ¡Tío qué bien escribes! Ve a presentaciones, a todas las que puedas. Apúntate a talleres literarios (si lo imparte alguien bien situado en internet, mejor), a jornadas sobre literatura relacionada con lo que sea, desde la literatura y el cine negro, hasta literatura en la cocina. No menosprecies ningún grupo organizado, como en todos los ámbitos, la soledad te hará transparente.

Ya te he dicho todo lo que no hago y no he hecho nunca (y así me va). Si quieres triunfar de verdad, haz lo que te he dicho y no sigas leyendo.

Te he avisado.

Si eres un escritor que escribe porque NO puede NO escribir, ahí van mis consejos:

-Escribe cada día, sigue un horario que te sostenga cuando llegan los momentos de caída libre, esos en los que pierdes el norte y te desanimas. Ya, ya sé que tienes familia y trabajo, optimiza tu tiempo, si no puedes escribir más, pues escribe menos, pero escribe.

-Deja que las palabras fluyan, no las aprisiones, ni las empujes. No seas de esos que cuentan cuántas palabras tiene su novela. Todo dependerá de lo que "necesitas" contar.

-Lee mucho, no importa lo que leas, es un hábito saludable que hay que cuidar y mantener. No seas esnob, lee a Flaubert porque te gusta, no porque suena bien cuando se lo dices a tus amigos.

-No hagas caso de nadie, repito, de nadie que te diga cómo tienes que escribir. Una cosa es aprender ortografía y gramática y otra muy distinta es decirle al autor cómo debe explicar su historia. Te gusta o no te gusta, punto. Productos los hay en la música, en el cine y, cómo no, en la literatura. Es una opción como cualquier otra, pero no te la aconsejo, si de verdad te gusta escribir.

-Para escribir hay que tener algo que contar, pero no hace falta tener una vida de película, tan solo es necesario ser un buen observador. Mi experiencia me ha enseñado que para ser escritor hay que saber escuchar y sentir.

-Cuando acabes una obra, déjala un tiempo en el cajón, descansa de ella para que al retomarla te sea más fácil encontrar los fallos.

-Busca en tu entorno alguien de confianza, alguien que siempre te haya dado buenos consejos, que no tema tus reacciones y, sobre todo, que le guste leer. Dale tu novela y deja que sea sincero. No busques un profesor, ni un escritor, ni nadie que tenga nada que ver con el tema. Un lector, eso es lo que necesitas.

-Cuando estés seguro de que has terminado, que tu obra ya puede salir por ahí, busca cinco o seis lectores más. Utiliza a tus amigos para que se la den a amigos suyos, gente que no te conozca, que no te deba nada. Si se trata de una novela para un público juvenil, busca lectores jóvenes. Deja la última página en blanco y tu dirección de Mail para que te escriban sus impresiones al acabarla. Lee muy atentamente esas opiniones, son las más sinceras que vas a conseguir. Estoy segura de que si las editoriales utilizasen este sistema, les iría mucho mejor.

-Participa en concursos literarios, en todos los que puedas, no pierdes nada y te motivarán.

-Escribe un blog, conjurará tus fantasmas.

-Pero no te olvides de divertirte, al final es lo único seguro que obtendrás.